LOLA

... Al principio, cuando conocí a Roger no me dijo que era maricón. Bueno, dijo que lo había dejado, como si esas cosas pudiesen dejarse así como así. Me invitó a Nueva York aquella noche. Los dos estábamos muy borrachos, le llevé a mi casa y le pegué una mamada divina. Cuando llego a Nueva York me encontré con que compartía piso con alguien. Wojtek me pareció una señora con bigote.
Me había llevado mi dinero (unos setecientos dólares para una semana) y Roger me hizo pasar ridículo ante sus amigos cuando dijo que había ido a la ciudad a pedir limosna. Yo lloro por esas cosas.
Pero qué sabía yo de este secuestro. El me dijo que sería sólo una semana y ya llevo un año aquí. Para colmo tengo que dormir en el sofá porque sólo hay una cama grande donde duerme Roger con Wojtek. ¿Qué tal si un día viene inmigración y me ve durmiendo en el sofá? Quieras que no a mí me da mucho miedo todo eso. ¿Y qué les digo cuando vean a Wojtek durmiendo con mi marido? Es absurdo. Menuda es inmigración para esas cosas.
Después, de tanto estar sola, acabé yéndome con Wojtek a los bares de Jackson Heights. Se emborracha tanto que tengo que ingeniármelas para regresar porque él no es capaz de decir una palabra. Y cuando está muy borracho me pregunta qué tengo que ver con Roger. Creo que sigue enamorado de él y por eso bebe. No me extraña. En esta casa hay una mala energía que me tengo que pasar el día entero encendiendo velas, ya sabes, para crear algo espiritual. Hay noches que incluso veo sombras negras y miedo me da llegar hasta el lavabo. Si mi papi supiese lo que estoy haciendo me dejaba. Ya me lo dijo: "Si tardas mucho no aguantaré" Pero él tampoco puede ofrecérmelo todo. Está casado con una chilena que se niega a divorciarse de él.
A mí los viejos me encantan. Hace poco conocí a uno en New Jersey. Me invitaba a todos los sitios. Tenía el pelo canoso, de esos interesantes y le dije: ¿Por qué no vamos a tu casa a pasárnoslo bien? Roger no soporta que haga esas cosas porque no quiere verme feliz. Lo que te digo, energía negativa. Seguí saliendo con el viejo de New Jersey hasta que me lo quitó una negra. Ya no lo volví a ver.
Y es que Roger me controla la mente. Yo no quería venir a Nueva York. ¿Qué hay en Nueva York? Si es la ciudad más cutre que he conocido. Y Manhattan no son más que cuatro edificios muy altos, pero el resto es todo decadente. La gente tiene a esta ciudad idealizada porque las películas se la presentan tan bien. Y noto que me controla la mente, no soy la misma cuando estoy aquí ni la gente que me rodea es la misma cuando interviene Roger. Mira, no soy racista en absoluto, pero los negros no han sido nunca mi perdición. Pues bien, cuando voy con él por la calle me paso el día mirando a los negros con una lujuria que sé que no es mía. Y le digo a Roger: "I laik mens black" Es una especie de obsesión. No es que los mire por extrañeza, sino porque siento qu eme atraen, que me atraen sexualmente. Eso me asusta porque sé que es él que me controla la mente. Y es que los americanos de Nueva York son otra historia. A mí lo que me gustan son los cowboy. Me iría a Texas, por ejemplo y me ligaría a alguien como el del anuncio de Marlboro. Como el primero, no como el segundo que se hizo la cirujía estética.
Lo peor de todo es que Roger me hace decirle que le quiero cuando este matrimonio es una farsa. Yo no le quiero...¡si cuando intenta besarme aparto la cara! Me casé con él porque él me invitaba a venir y yo necesito aprender inglés. En España aprender inglés está muy caro pero a este paso, cuando llegue a España y me pregunten dónde lo he aprendido tendré que decir que en la calle. Ahora voy a empezar un curso de inglés en la universidad. Es una universidad preciosa en Manhattan. Eso es otra historia. En lugar de una universidad parece una discoteca, todo está lleno de gente joven arriba y abajo. A esa era a la que yo quería ir no a aquella cosa de Queens College. Esa es para Wojtek.
Con el viejo que conocí en New Jersey fuimos un día a tomar el sol a un parque. Me quité la ropa y me quedé en bragas y sujetador porque como era ropa interior de Christian Dior que me había comprado él ni se notaba que eran bragas.
Lo que debería hacer es buscarme la vida por ahí y encontrar otro viejo americano de verdad o casarme con otro en cuanto me den los papeles y hacer negocio con eso. Y si Roger me molesta mucho cojo mi maleta y me voy a Londres a hacer de au-pair que van muy buscadas. El no sabe que antes va mi papi que él. Suerte que mi papi no sabe que me voy a quedar tanto tiempo, si lo supiera me dejaría. Lo de buscarme un papi aquí es otra historia, ¿entiendes? Mi papi está allí y yo aquí. El es para cuando vaya allí.
Me encanta ir a España de vacaciones porque te encuentras a los amigos y te invitan a todo. No es como cuando vives allí que no te hacen ni caso. Roger se aprovecha de eso. Dice que es de Nueva York y, claro, tarde o temprano encuentra algún desgraciaillo que se le cae la baba al oír eso y se lo liga. Yo no necesito recurrir a eso, primero porque tengo a mi papi con el que voy a todas partes, y luego porque con mi manera de ser conquisto a quien quiero. Con mi papi hemos ido hasta a discotecas gay. El no tiene problema para eso. Al principio salíamos los tres (mi papi, yo y Roger) y bailábamos como locos. Un día, borracha, bailé encima de una silla. Casi me caigo y mi papi pensaba "ay que esta se mata". No me caí y la gente aplaudió y todo. Para que veas que somos gente que no tenemos problemas para eso. Pero de ahí a decirle a un gay que le amo es muy fuerte. Yo me casé por lo del inglés y él por el rollo de sus impuestos. ¿A qué viene ahora a pedirme que le quiera? A veces se me tira encima y me llena la cara de besos. Es más, ni siquiera es mi tipo de hombre. A mí me gusta más el tipo macho. Pronto iré a Texas y me ligaré a uno de esos cowboys.
La verdad es que no sé por qué he venido aquí. Ya te digo que me controla la mente. A veces, de noche, sola en la oscuridad, lo noto, no soy yo. Y hablo con mi papi y le pregunto: ¿Qué me pasa? ¿Quién es esta persona dentro que piensa por mí? Estoy asustada. Debería irme cuanto antes. Roger dice que es porque he pasado una infancia muy dura y eso no es cierto. Quiero decir que yo también he pasado por ese tipo de infancias. Eramos un montón de hermanos y mi padre era alcohólico. Pues nos echó a todos de casa y viví en la calle con mi madre y mis hermanos. Sin embargo, no soy como Roger. No me quiero vengar del mundo. Intento hacerr las cosas lo mejor posible y ya está.
Antes de traerme a este barrio horrible de Brooklyn Roger me dijo que alquilaría otro y tendría una habitación para mí. Todavía estoy esperando. Me da igual, quiero el divorcio ahora. Ya le he dicho que llame al abogado. No quiero ser americana, aquí todos están chiflados. ¿Pero no has visto cómo hablan? Si apenas se les entiende el "please" Y a cada rato sueltan el "excuse me". Primero excuse me y luego te empujan. No, así no va la cosa.
Mi papi ya me ha dicho que si no vuelvo rápido no piensa esperarme. No sabe que voy a quedarme aquí mucho tiempo. Le dije que eran solo dos semanas. Ay, el día a día en esta ciudad puede ser horroroso.
Wojtek me ha dicho que vaya con él al bar pero...¿qué hago yo en un bar de maricas? Te voy a contar una cosa. Será casualidad pero fìjate que el carnicero de Toledo ha perdido su trabajo justo después de que Roger le visitara. ¿No es eso sospechoso? Su compañía no es buena, te lo digo yo. Me iría ahora mismo pero todavía no sé cuándo es el día. Me refiero al papel verde que te ponen en el pasaporte y eso. Y tampoco puedo trabajar porque lo de los papeles no avanza. Ayer discutimos con Roger. Me dijo que dejaría de pagarme las clases de inglés y yo le pedí el divorcio. No quiero quedarme más tiempo aquí. Esto no es como en las películas. Hay mierda por todas partes. Y todo es dinero, dinero, dinero. Ir a Manhattan es carísimo. Y si encima te tomas una cerveza ni te digo, que si propina aquí y propina allá. Prefiero España. Allí por lo menos me entiendo con la gente y son más o menos iguales. No tenemos estas negras gritonas. Por cierto, no sabía que las negras eran tan espabiladas. Lo poco que tardó esa en quitarme a mi viejo de New Jersey.
Me encantaría irme a Texas, pero, la verdad, ahora no tengo ya ganas ni de eso. Miedo me da este país. Me imagino que allí serán todos como el del anuncio de Marlboro, fuertes y paquetones. Yo tenía un amigo en Madrid que era así. Era gay y tenía su pareja de diez años. También andaba con viejos. Roger jamás ha conocido a un macho como he conocido yo, eso lo puedo decir. A él le fastidia eso porque dice que discrimino a los homosexuales. Te voy a decir otra cosa: ¿tú sabes esa historia de que ha cortado con un tal Bill porque encontró una caja de condones en su cuarto? Pues es mentira, es mentira suya. El pobre Bill, si es más callado que una verja. Además, ¿no ves dónde vive? Si allí no pasa un alma en todo el día. Paso de volver a esa casa, es demasiado fría. Da al mar, eso sí, pero no soporto la humedad esa. Además tiene una hermana lesbiana muy machorra que es muy bruta. No la entiendo bien porque aún no me defiendo con el inglés pero me suena feo lo que dice. Feo y brusco. El día que estuve en su casa la vi hasta escupir en el jardín. No, yo no quiero eso.
Hoy me ha dicho que me seguirá pagando las clases pero yo no quiero que lo haga porque si no me amenaza con dejar de pagar las clases yo no puedo amenazarle con el divorcio y me quiero ir. No sé qué está haciendo con mi mente que no me voy. Tengo miedo. Le tengo miedo a él y al espíritu de su abuela.
La música que escucha es diabólica. En casa de Bill ví exactamente los mismos discos. Mira, por lo menos se entienden en algo. Una vez compró un disco tan diabólico que tuvo que tirarlo por la ventana. Decía que le estaba influenciando. Desde luego que una no pararía de encender velas en esta casa. Quiero irme con mi papi antes de que sea demasiado tarde.
Fíjate que me leyeron una vez la mano y vieron a Roger. Pues a él también se la leyeron y me vieron a mí. Quiero cambiar mi destino. Si me voy ahora quizá lo cambie pero resulta que no hay plazas de avión. Ya le he dicho que no me importa irme por Londres.